Justicia según Hesiodo y Homero

POSIBLES IDEAS DE JUSTICIA ENTRE HESÍODO Y HOMERO

Hernán Ortiz Rivas escribe en 2003 el libro La especulación iusfilosóficas en Grecia Antigua: desde Homero hasta Platón y es traída a nosotros por la editorial Temis S.A y la presente reseña es acerca del primer capítulo correspondiente a este libro llamado: Posibles ideas de justicia entre Hesíodo y Homero.

Homero

Es importante ver el papel de estos dos poetas como forjadores y creadores de la cultura griega y de su teogonía, siendo ellos quienes les pusieron los sobrenombres a sus dioses, las formas que tenían, sus honores y sus artes.

El autor busca hacer una comparación entre lo escrito por Homero y Hesíodo en sus correspondientes obras creadas en la Antigua Grecia y para empezar vamos a identificar las ideas planteadas por Homero en sus conocidos epos La Ilíada y La Odisea.

Es sorprendente que aún en la actualidad algunos teóricos duden de la existencia de Homero e incluso crean que estas dos obras pudieron haber sido escritas por personas diferentes, hasta Vico afirma que fueron “creación anónima de una época todavía bárbara” pero los que refutan esto, consideran a Homero como el poeta máximo, admirado notablemente por su imitación dramática de la realidad.

Quizás esta interrogante surge por la extraordinaria forma de Homero de plasmar ámbitos socioeconómicos, políticos y culturales en su obra de manera tan sobria como con la epopeya hélica de Troya o el retorno de Odisea.

Hesiodo

Unos autores consideran importante ver el epos de Homero desde un sentido antropológico, siendo la sociedad homérica una memoria oficial de la cultura enfocándola en la agricultura, la ganadería y la esclavitud de un pueblo.

La idea de justicia de Homero nace de problemas jurídicos vistos casi como en la actualidad y es definida como la “discrepancia de parecer acerca de lo justo y lo injusto” y destaca la virtud y la justicia como aspectos esenciales en la sociedad y se debe hacer uso de la justicia para la reparación de conflictos jurídicos.

Para Homero la justicia debe estar gobernada por los dioses antropomórficos que revela en su obra y así mismo, cree que todo ocurre por cooperación divina dada por la omnipresencia de los dioses griegos para organizar desde la agricultura y la ganadería hasta el reino animal, dicha organización según el autor originó una notable diferenciación entre lo civilizado y lo primitivo; para esto, le da el honor a Temis de ser la diosa del orden y el equilibrio, la hospitalidad  y los ritos sagrados, dándole a toda la idea de justicia un sentido completamente cósmico.

Luego de haber visto a Homero, el autor también resalta la importancia de Hesiodo en el origen de la filosofía griega considerándolo el primer poeta-filosofo gracias a la dignificación que le dio al trabajo, el estudio que le hizo a la naturaleza, al origen de la sociedad, el linaje de los dioses y al humano en su esencia.

Ya que para Hesíodo la justicia gira en torno a la sociedad, él utiliza a Temis, Eros, Gea y Dike para representar la lucha de poderes del cielo y la tierra por el triunfo de la justicia, teniendo el mismo sentido cósmico de Homero.

Es donde cabe diferenciar el trabajo que hicieron cada uno de los poetas, siendo Hesíodo el que logró establecer una conexión lógica entre la justicia y el trabajo como fundamentos de la cultura humana, e incluso es significativa la manera en que da a conocer el proceso de formación de la polis, la desintegración de la estructura gentilicia teniendo una actitud revolucionaria frente a una forma social esclavista dividida por los aristócratas y los simples mortales que genera una vida violenta e injusta.

El trabajo es un tema sustancial para entender la obra de Hesíodo ya que considera que es el camino que conduce al bien y que sin duda es el que lleva a que sea efectiva la justicia, siendo esto último lo que diferencia un estado animal de un estado social humano.

Para finalizar, la obra de Hernán Ortiz distingue que para Hesíodo el mundo está regido por leyes protegidas por la divinidad; que el hombre está obligado por la ley y por lo tanto debe corresponder a un orden; y por último, que vivir dentro del derecho es parte de la esencia del hombre.